Las 7 formas principales en que las redes sociales están destruyendo el mundo

Las redes sociales no se tratan sólo de contenido interesante y mejores amigos que nunca has conocido.

Aquí hay siete razones por las que el título de este artículo no es una exageración más.

7. Las redes sociales reducen la atención

05rtyfw3En 2015, Microsoft realizó un estudio para determinar la capacidad promedio de atención humana. Esto no se hizo con fines de entretenimiento, sino para ayudar a los especialistas en marketing a hacer frente a la disminución de los niveles de concentración de los consumidores. En el año 2000, el lapso de atención promedio ya se había reducido a 12 segundos, y los investigadores se preguntaban si otros 15 años de ubicuidad de Internet lo habrían erosionado.

¿Resultado? Ocho segundos. Esto es un segundo menos que el de un pez dorado. ¿Aún estás leyendo esto? Bien.

Si bien es imposible señalar a las redes sociales como las únicas culpables de la mala capacidad de atención, está claro que los tweets de 280 caracteres y los videos de TikTok de 15 segundos juegan un papel importante.

  • La disminución de nuestra capacidad para concentrarnos en 50% en tan solo una generación no habría ocurrido sin la avalancha de estímulos que distraen, gracias a las redes sociales.
  • La multitarea inherente a las redes sociales también afecta negativamente la capacidad de atención. Después de todo, necesitas tener tiempo para mirar el feed de favoritos, chatear en el chat y dar me gusta al comentario o imagen que te guste.
  • Cuanto más contenido hay en las redes sociales, menos tiempo dedicamos a él. Por ejemplo, los usuarios móviles de Facebook dedican una media de sólo 1,7 segundos de atención a cada elemento.

6. Las redes sociales son adictivas

hvzf0vroLas redes sociales pueden ser tan adictivas física y psicológicamente como la nicotina, el alcohol o los juegos de azar.

El “efecto FOMO” (abreviatura de Fear of Missing Out) es el responsable de esto. Se llama así al deseo de mantenerse informado sobre lo que hacen otras personas.

Desafortunadamente, caer en la trampa FOMO hace que una persona se sienta más sola e incluso infeliz. Al mirar fotografías de amigos exitosos (aunque estas fotografías a menudo son una puesta en escena), creemos que las vidas de los demás son más felices que las nuestras.

Los síntomas de la adicción a las redes sociales incluyen:

  • cambios de humor;
  • ansiedad;
  • problemas en las relaciones personales provocados por el uso compulsivo de las redes sociales;
  • y recaer en un comportamiento compulsivo después de un período de “abstinencia” de las redes sociales.

5. Por favor, dale me gusta

q5tgih3hCuando entramos en una sala con gente y decimos algo, recibimos comentarios en tiempo real. Por el contrario, las “salas” de las redes sociales están mucho más pobladas y no es tan fácil llamar la atención. Y los me gusta, como símbolo de reconocimiento y respeto en el espacio virtual, proporcionan minicargas de dopamina. Admítelo, ¿también disfrutaste viendo tu publicación recopilar me gusta y comentarios durante varias horas o días?

Los Me gusta también son educativos, en el mal sentido. Dejan claro qué tipos de publicaciones reciben los comentarios más positivos. ¿Por qué es eso malo? Este es el tema del siguiente párrafo del artículo.

4. Pollos cibernéticos

hdhsao13Las redes sociales vuelven cobardes a la gente. Al comprender qué tipos de publicaciones suelen atraer más me gusta, compartir y seguir, muchos usuarios optan por centrarse sólo en estos temas, evitando cualquier cosa que se considere controvertida.

Por ejemplo, el 70% de usuarios de redes sociales en Estados Unidos nunca o rara vez publican sobre temas políticos y sociales. Así lo demuestran los resultados del último estudio de mayo realizado por la empresa de estadística Pew Research Center.

Y las dos razones principales para hacer esto son el miedo de los usuarios a que sus publicaciones sean utilizadas en su contra y la renuencia a ser atacados por sus opiniones.

3. Acoso virtual

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73% internautas adultos observaron actos de agresión en Internet. Y 40% lo experimentó personalmente. Estos son los hallazgos de un estudio del Pew Research Center realizado en 2015.

Pero no sólo los adultos, sino también los niños se enfrentan a una agresión virtual. Según Kaspersky Lab, uno de cada tres niños en Rusia ha sido víctima del ciberbullying o ha oído hablar de este fenómeno. Al mismo tiempo, sólo los padres 7% consideran que el acoso en línea es una amenaza informativa importante para los niños.

Las principales plataformas de ciberacoso en Rusia son VKontakte (47% registraron episodios de acoso en 2020), Instagram (24%) y YouTube (15%). – estos son datos del centro de monitoreo de Seguridad 2.0.

2. Las redes sociales están convirtiendo la libertad de expresión en un mito.

mlh2rxmfLas redes sociales ponen la censura de miles de millones de personas en manos de unos pocos. Un ejemplo llamativo es el bloqueo de las cuentas del expresidente estadounidense Donald Trump en Facebook, Twitter e Instagram.

Surgen dos preguntas:

  1. ¿Dónde está la línea más allá de la cual la libertad de expresión en las redes sociales se vuelve peligrosa?
  2. ¿Quién lo lleva a cabo?

El estudio Freedom Online 2019: The Social Media Crisis, publicado por Freedom House, examinó las políticas de Internet de 65 países, incluidos China, Estados Unidos y Rusia.

Los investigadores han llegado a la conclusión de que la libertad en Internet ha disminuido en todo el mundo por noveno año consecutivo, y China tiene el peor desempeño. En 47 países se realizan periódicamente detenciones por declaraciones políticas, sociales o religiosas de ciudadanos en Internet.

¿Aún quieres hablar libremente en las redes sociales? Entonces necesitas obtener la ciudadanía islandesa, este pequeño país tiene la mejor libertad de expresión virtual del mundo.

1. Es difícil distinguir la mentira de la verdad en las redes sociales.

En las redes sociales es difícil distinguir la mentira de la verdad Según un estudio publicado en una edición de 2019 de MIS Quarterly, solo 44% personas pudieron juzgar con precisión si los titulares de las redes sociales eran verdaderos o falsos.

Los investigadores también encontraron que los usuarios eran más propensos a creer en los titulares de noticias que coincidían con sus opiniones políticas. Y los titulares que cuestionan sus opiniones reciben poca atención cognitiva.

"Todos pensamos que podemos detectar noticias falsas mejor que la persona promedio, pero simplemente no es posible"., afirmó la autora principal del estudio, Patricia Moravec, en un comunicado de prensa. "El entorno de las redes sociales y nuestros propios prejuicios nos hacen a todos mucho peor de lo que pensamos"..

Pero la incapacidad de distinguir la realidad de la ficción es sólo uno de los problemas de las redes sociales. Los investigadores estiman que hasta 15% de usuarios en algunas plataformas, incluido Twitter, son robots encargados de todo, desde manipular mercados e influir en las elecciones hasta difundir ataques de phishing y aumentar el número de seguidores y comentarios.

En general, las redes sociales son el salvaje oeste de la información, donde la realidad y la ficción pueden ser indistinguibles y la verdad se mezcla hábilmente con la desinformación. Así que no creas todo lo que se escribe en Internet. ¡Esto es lo que dijo el camarada Lenin!